jueves, 5 de diciembre de 2019

Maratón Donosti 2019

Muy buenas amigos,

hace ya varios días que tuve el placer de correr la Maratón de Donosti. Y digo placer, porque tiene poco que envidiar a otras maratones que tienen mucho más nombre por celebrarse en grandes ciudades europeas. En lo que respecta a mi carrera, el resultado no fue el deseado, ya que paré el reloj en 2h 53min 30seg, pero me quedo con la sensación de que estamos cerca de conseguir volver a bajar de 2h50min.


Las últimas semanas de entrenamiento han sido bastante buenas, tanto en el plano aeróbico como en el anaeróbico. Desafortunadamente, el día que tocaba realizar la tirada de mayor kilometraje del recorrido (32km) fue un día con muchísimo viento (rachas de hasta 60km/h), que impidieron que fuera un test fiable de cara a ver ritmos de competición. No obstante, teniendo en cuenta que los resultados en las carreras preparatorias (medias maratones de Valladolid y Valencia) no habían sido del todo buenos, decidimos junto al míster, centrarnos en intentar bajar de 2h50min y mejorar mi marca con diabetes.

Adicionalmente, hace pocas semanas, pase mi habitual control semestral de la diabetes. Mis niveles de hemoglobina glicada han vuelto a bajar, colocándome en un estupendo 7%.

Plan entrenamiento Maratón Donosti 2019 - Cuatro últimas semanas

Cuando voy a correr una maratón, me gusta llegar el Viernes y dormir en la ciudad al menos dos noches. Además, como llegamos poco después de la hora de comer, pudimos realizar la recogida del dorsal, que fue algo caótica, la verdad, con una única fila para todos. Otra ventaja de llegar el Viernes, es poder realizar un rodaje en la mañana del Sábado. El día es terrible para correr, lluvia y rachas de viento de hasta 100 km/h. Así que, lo que pretendía ser un pequeño trote para soltar las piernas, se convirtió en una gymkana por las calles de Donosti. :-)

Consigo mantener una muy buena gráfica de glucosa durante todo el sábado. Sorprendentemente para mi, el Domingo, sufro una pequeña hipoglucemia al despertar (73 mg/dl) que remonto con un mini-desayuno. Tengo la sensación de haber descansado bien, por lo que estoy tranquilo. Aunque el día ha amanecido con mucha lluvia, la previsión es que durante la carrera no nos mojemos. La temperatura es bastante buena para correr y el viento apenas se nota.

Preparado para la batalla

Antes de dejar la mochila en el ropero, último control de glucosa sanguíneo: 139 mg/dl, con tendencia descendente, así que decido no poner insulina. Realizo un ligero calentamiento  y me voy rápido hacia el cajón, ya que veo que no hay ningún control de acceso y no quiero quedarme muy atrás.

La salida se realiza por una calle algo estrecha para la cantidad de gente que somos. Me llevo un par de codazos, pero consigo salvar los primeros metros sin ningún tropiezo importante. Practicamente desde el inicio, me pongo en ritmo objetivo (en torno a 4:00-4:05 min/km) y consigo encontrar un grupo de corredores de ritmo similar.

KM5. 20:09 (4:02 min/km). Glucemia 130. Los avituallamientos en carrera no son demasiado grandes (5-10 personas dando agua), pero sí son numerosos (aproximadamente cada 3km). Me mantengo dentro del grupo, que es liderado claramente por dos chicos. Se produce una conversación en eusquera entre varios de los miembros del grupo. Cuando entiendo que han terminado, hablo yo: “Os he entendido todo, a 4:00 min/km hasta la meta”. Algunas risas y volvemos a concentrarnos en la carrera.

KM10. 40:11 (20:02 - 4:00 min/km el split). Glucemia 140. La tendencia de la glucosa es ascendente y me empiezo a preocupar un poco, pensando que igual no pueda tomar gel en algunos kilómetros más. La animación no es muy numerosa, pero los pocos que ahí se dejan oír. 

Este es uno de los tramos más bonitos del recorrido, corriendo a lo largo de toda la playa de la Concha, aunque también es cierto que en las zonas más cercanas a la costa, el viento es donde  se deja notar con mayor insistencia. Intento quedarme con todos los detalles posibles del recorrido, pensando en la segunda vuelta. Hay algunas cuestas (la mayoría cortas y muy tendidas), pero lo peor son los giros de 180º que te rompen el ritmo de carrera.

Km10

KM15. 1:00:15 (20:04 - 4:01 min/km el split). Glucemia 170. Tras llegar a su punto más alto, observo que la glucosa empieza a descender, así que decido tomar el primer gel. Para facilitar la absorción, lo diluyo en media botella de agua y voy bebiendo a pequeños sorbos. Sigo muy metido en el grupo, que avanza a ritmo constante. Algunos corredores de la media nos adelantan y hay que controlar para no acelerarse.

KM20. 1:20:13 (19:58 - 4:00 min/km el split). Glucemia 165. El grupo que llevamos desde el principio pasamos la media maratón unos segundos por debajo de 1h25. Empieza la segunda vuelta del recorrido y, viendo que en este punto de la carrera me encuentro muy bien, paso a encabezar el grupo junto a uno de los corredores que lleva tirando desde el principio (sé que se llama Iosu, ya que recibe constantes ánimos desde el público)

Media Maratón

KM25. 1:40:04 (19:51 - 3:58 min/km el split). Glucemia 150. Momento de inflexión en la carrera. Tengo muchas dudas sobre si tomar un segundo gel o esperar al siguiente control. El glucómetro me dice que la tendencia es estable y tengo tan buenas sensaciones buenas que decido no tomar gel. A partir del kilómetro 28, me cuesta seguir el ritmo del grupo. Decido irme hacia atras y dejar unos metros de separación, confiando en poder recuperar después.

KM30. 2:00:20 (20:16 - 4:03 min/km el split). Glucemia 145. Viendo que la glucosa está en tendencia descendente, estoy más confiado de tomar un nuevo gel. Opto por un Gluc-up, que es más líquido que los geles que tomo habitualmente y pienso que se absorberá antes. Desgraciadamente, las piernas ya no me responden. Soy incapaz de volver a ponerme al ritmo objetivo y sufro un pequeño amago de “calambres” en la pierna derecha, primero en la zona del isquio y poco después en el gemelo. No queda otra que asumir la realidad y renunciar definitivamente al sub2h50. No obstante, no me rindo del todo y me quedo en ritmos en torno a 4:15 min/km, pensando en asegurar el 2h55.

Km30

No consigo ver el indicador del km35. Decido meter un segundo gel, pensando en evitar un hundimiento de la glucosa con la bajada del ritmo. Me tomo los avituallamientos de los km36 y 39 con mucha calma, cojo el agua, me echo a un lado para no molestar y me paro a beber y a estirar un poco. A estas alturas, perder 30" más o menos, me importa poco, y siempre es mejor que lesionarte o sufrir un desfallecimiento.

KM40. 2:43:54 (43:34 - 4:21 min/km el split). Glucemia 100. Estos últimos diez minutos hasta el final de la carrera me dedico a disfrutar: escucho el "Sarri Sarri" de Kortatu y me pongo a bailar, choco manos con el público, animo a corredores que van mas castigados... Entramos en el pequeño estadio donde esta la línea de meta, miro a la grada y, a pesar de no conseguir el objetivo buscado, celebro la finalización de una nueva maratón.

18ª Maratón

El principal punto positivo que me llevo de esta carrera es la gestión que realice de la diabetes. Creo que acerté con la decisión de no inyectar insulina antes de la salida, pero me equivoqué al no tomar el segundo gel en el km25. Eso, y la pequeña aceleración realizada a partir del km20, supusieron que acabara con mis depósitos y no me quedara fuerza para afrontar los kilómetros finales de la maratón.

Gráfica glucosa Domingo

Para la celebración postmaratón, nada mejor que una buena chuleta y una visita al restaurante de Karlos Arguiñano en Zarautz.


Ya estamos pensando en la siguiente maratón y planificando nuevas carreras. De momento, a disfrutar de los entrenamientos y terminar el año en la San Silvestre de Getafe.

Gracias a todos por el apoyo.

miércoles, 20 de noviembre de 2019

Medio Maratón Valencia 2019

Muy buenas,

cinco semanas después de participar en la Media Maratón de Valladolid, y dentro del plan de preparación previo a la Maratón de Donosti, era momento de volver a ponerse un dorsal para disputar otra Media Maratón, esta vez en Valencia, donde mi tiempo en meta fue 1h21min49seg.

Diploma de la carrera

Este periodo de entrenamientos entre medias maratones, ha estado marcado por una bajada de las temperaturas, que ha conllevado una consecuente mejora en los ratios entre pulsaciones / ritmo. La conclusión a la que llegó el mister tras revisar los datos era que estábamos mejor que para Valladolid, pero lejos de intentar MMP, por lo que fijamos el objetivo para la carrera en realizar un tiempo en torno a 1h20min.

Adicionalmente, en este periodo tocó revisión con el médico del estado de la diabetes. El indicador de la hemoglobina glicada estaba en 7, que es un valor más que correcto, por lo que súper contento.

Plan Entrenamiento

Durante la noche previa a la carrera, consigo que la gráfica de la glucosa se mantenga en unos valores correctos y, al despertar (2h30min antes de la carrera) el glucómetro marca 138mg/dl. Me tomo mi habitual par de cafés cortados, antes de dirigirme trotando a la zona de salida, que está a unos 10'. Último control de glucosa antes de dejar la mochila en el ropero. El valor se ha elevado hasta 169mg/dl y la tendencia esta en aumento. Decido arriesgar y ponerme 2 unidades de insulina.

Aunque estamos a finales de octubre, la temperatura es elevada (15º a las 9.00) y está acompañada de unos niveles de humedad que no favorece nada a los corredores. Antes de entrar al cajón, ya me he quitado la camiseta que suelo llevar para desechar antes de la salida.

Antes de entrar al cajón

A pesar de la cantidad de gente en mi cajón (para tiempos entre 1h19 y 1h25), consigo ubicarme en una muy buena posición. La salida se realiza de manera limpia gracias a la amplitud de la calle y pronto consigo controlar el ritmo en torno a 3:55-3:50. Esta prueba tiene un nivel altísimo, así que la densidad de corredores es mayor a la que estoy acostumbrado, lo que facilita enormemente la posibilidad de encontrar un grupo que tire de ti. No todo son buenas noticias, la climatología no perdona y en el km 3 ya estoy sudando bastante, lo que también se nota en las pulsaciones.

KM5. 19:26 (3:53 min/km). Glucemia 170
Los avituallamientos en carrera son muy grandes y con las condiciones ambientales se agradece que estén dando botellas de agua de medio litro. Media botella por encima y un buen par de tragos para ir calmando la sed. Según pasan los kilómetros, me doy cuenta de por qué salen grandes marcas en este recorrido: calles largas y anchas, con pocos giros, que permiten coger ritmo constante. Aunque es cierto que en este tramo echó en falta algo más de animación.

KM10. 38:46 (19:20 - 3:52 min/km el split). Glucemia 130
La glucosa ha empezado a descender, así que tras refrescarme en el avituallamiento, intento un cambio de ritmo a 3:45min/km para probar como estoy realmente. Rápidamente me doy cuenta que no voy sobrado, por lo que decido ser conservador en este split y mantengo el ritmo que vengo manteniendo desde el inicio. A pesar de eso, voy adelantando a un buen número de corredores, que seguramente estén pagando un exceso de euforia en los primeros kilómetros de la carrera.

Niveles glucosa - Domingo

KM15. 58:13 (19:27 - 3:53 min/km el split). Glucemia 105
Casi lloro de emoción al ver el nivel de glucosa. Voy a poder tomarme un gel y justo en el mejor momento. Vierto el contenido en media botella de agua y me lo voy tomando a pequeños sorbos. Me adelantan un par de corredores, que escucho van a intentar ir a 3:45min/km hasta meta, y decido engancharme detrás de ellos. Consigo aguantar el ritmo hasta el km18 cuando el isquio derecho me da un pequeño aviso. Considero que no merece la pena forzar más de la cuenta y relajo un poco el ritmo. En los kilómetros finales, sí se nota muchísimo la animación y casi te obliga a dar un poco más. La recta de meta se me hace eterna con carteles cada 100.

Apretando los dientes en los últimos kilómetros

Es evidente que no ha salido la carrera que tenía en mente y para la que pienso había entrenado. Sin embargo, he conseguido gestionar la diabetes de una forma más que correcta, así que quedo contento por esa parte.

Otra carrera con Juanvi y Antonio

Un saludo,

lunes, 30 de septiembre de 2019

XXXI Medio Maratón Ciudad de Valladolid

Hola a todos,

retomamos el blog, cinco meses después de la última entrada, para comentaros mi participación en la Media Maratón de Valladolid de este pasado fin de semana. No puedo decir que esté contento con la marca conseguida 1h22min25seg (muy lejos de mi MMP) Sin embargo, el viaje tuvo una noticia muy buena que contaré al final de la entrada...

Con los compis del TrainingOscar antes de la salida

Después de la participación en un par de 10K veraniegos (Getafe, el 22 de Junio, y Pinto, el 3 de Agosto), afrontaba esta competición con siete semanas de entrenamiento. Los entrenamientos de calidad, sobre todo las series largas, no terminan de salir bien, y hasta las últimas dos semanas no tengo buenas sensaciones. Teniendo esto en cuenta, acuerdo con el mister salir con el objetivo de 1h20-1h21.

Plan Entrenamiento

Durante la tarde del Sábado y la noche del Domingo, consigo mantener unos muy buenos niveles de glucosa. Además, he conseguido descansar bastante bien y durante un buen número de horas. La media de Valladolid se inicia a las 10:00 y tenemos el hotel a cinco minutos escasos de la salida.

Al despertar, tres horas antes del inicio de la carrera, tengo un valor de 127 mg/dl (de los mejores que recuerdo) Aunque tenemos buffet desayuno en el hotel, yo me limito a tomar mi habitual par de cafés cortados (va todo muy bien, no hay que arriesgar)

Antes de dejar la mochila en el guardarropa, treinta minutos antes de la salida, último control de glucosa: 156mg/dl. Los nervios precarrera han actuado, así que me pongo 1ud de glucosa para intentar reducir ese valor. Pequeño calentamiento por el Parque Campo Grande y rápido a la zona de salida para poder posicionarse medianamente bien. No entiendo como una carrera del nivel de la Media de Valladolid no dispone de cajones en la salida...

BMTest en el guardarropa

En lo que respecta a la climatología, las condiciones son bastante buenas. La temperatura es fresca (12-14º) y no hay amenaza de lluvia. Hay presencia de viento, nada excesivo, pero que se dejará notar en alguna de las largas rectas del recorrido.

Tras un primer kilómetro de carrera algo rápido, me concentro en poner un ritmo de carrera en torno a 3:55min/km para no disparar las pulsaciones. Encuentro un trio de corredores del mismo club, que van a un ritmo acorde al deseado, y me acoplo detrás sin ninguna vergüenza. Además, me conozco el recorrido y sé que este primer 5000 es el complicado del recorrido (giros de 180º, paso por túneles..), por lo que mejor ahorrar lo máximo posible.


KM5. 19:38 (3:55 min/km). Glucemia 160. El avituallamiento, me parece algo escaso de voluntarios, apenas cuento siete u ocho personas. Para los que corremos a mi ritmo, es más que suficiente, pero cuando llegue el pelotón pienso que puede haber "problemas". Me encuentro con buenas sensaciones, así que acelero un poco el ritmo hasta 3:50, consiguiendo adelantar a mucha gente (hasta 22 posiciones), incluyendo a la tercera y segunda clasificadas de la categoría femenina (me sorprende ver que ambas van sin "liebres")

KM10

KM10. 38:25 (18:47 - 3:45 min/km el split). Glucemia 180. Al pasar por la alfombra y ver el parcial de este split, veo que hay un desfase importante entre el GPS y la medición oficial. Esta carrera está homologada, así que algo debe haber fallado en el Garmin, y ha provocado que me haya excedido en el ritmo de carrera. La glucosa sigue en aumento, por lo que descarto tomar un gel por el momento.

Las sensaciones siguen siendo positivas, así que vuelvo a centrarme en correr a un ritmo aproximado de 3:50. Lo consigo durante los primeros kilómetros, llevando pegados a mi espalda a un par de corredores. En una de las zona donde pega el viento de cara, a la altura del km 14, noto que no voy del todo cómodo y me dejo adelantar por mis dos "compañeros", pero cuando intento ponerme detrás, veo que soy incapaz de seguirlos.

KM15

KM15. 58:00 (19:35 - 3:55 min/km el split). Glucemia 170. La glucosa sigue demasiado alta como para pensar en tomar gel. También empiezo a notar molestias en el cuadripceps derecho, teniendo que recurrir a utilizar alguno de los botes de reflex que ofrecen voluntarios en patines. Ante esta situación en carrera, decido activar el modo supervivencia para los kilómetros que quedan y conseguir llegar a meta sin forzar en exceso.

KM20. 1:18:15 (20:15 - 4:03 min/km el split). Glucemia 150. Completo la carrera bastante enfadado conmigo mismo, por no haberme dado cuenta de que me estaba excediendo de ritmo en el segundo 5000. La glucosa postcarrera es de 124mg/dl.


En cuatro semanas, el 27 de Octubre, nueva cita con la competición en la Media Maratón de Valencia, en lo que debe ser el golpe de moral definitivo de cara a la Maratón de Donosti del día 24 de Noviembre.

Un abrazo,


P.D: Como os decía al principio, el fin de semana tenía una gran noticia. Acudía a esta carrera en compañía de mi novia Gema. Ella empezó a correr hace unos meses, consiguiendo hacer distancias de hasta 12-13kms en poco tiempo. Esas "prisas" por aumentar distancias, tan habituales en las personas que se inician en esto de correr, la han llevado ha tener un gran numero de molestias, que en los últimos meses la han impedido tener continuidad.

Gracias a su trabajo y esfuerzo, en las últimas semanas había conseguido volver a entrenar tres días por semana, por lo que, sin avisarla, la inscribí a la carrera de la distancia de la legua que se celebra en paralelo a la Media Maratón. Su cara en el momento de la recogida del dorsal fue indescriptible.

Sólo era su segunda carrera y estaba algo nerviosa, pero se marcó un carrerón y consiguió finalizar en tercera posición en su categoría. Ya ha subido al podium más veces que yo.... :-)

Podium - 3ª posición


sábado, 27 de abril de 2019

123rd Boston Marathon

"Hay que tener cuidado con lo que se pide, porque se puede cumplir"

Esta frase, que normalmente utilizo mucho, puede servir como resumen perfecto de la Maratón de Boston que disputé el pasado 15 de Abril. Me explico. Álvaro y yo nos pasamos toda la semana previa a la carrera pidiendo que no lloviera durante la misma. Pues bien, al final pasamos hasta calor corriendo, lo que complicó aun más una carrera que ya tiene sus propias complicaciones. Al final, salvamos la papeleta, completando el recorrido en poco menos de tres horas (2h 59min 22seg) y trayendo a casa una nueva medalla (la 5ª Major y la 17ª en el historial!!!)


Diez semanas de preparación especificas precedieron a esta maratón. El resultado de la Media Maratón de Sevilla de finales de Enero, nos hacia partir de una muy buena base (tanto física como psicológica) que ha permitido realizar los entrenamientos aeróbicos con las pulsaciones más bajas que recuerdo. Sin embargo, cuando tocaban entrenamientos anaeróbicos, el pulso se disparaba y las sensaciones no eran las adecuadas. Ante esta situación, acuerdo con el mister olvidarnos de intentar MMP y centrar el objetivo en mejorar la marca realizada en Berlín (2h49min50seg)

En la semana previa a la carrera, también pasé por el endocrino para la revisión semestral de la hemoglobina glicada. El resultado fue de 7,1%, por lo que todo en orden.

Boston Marathon - Resumen preparación

El día de la Maratón (Boston se corre en Lunes, en la celebración del Patriots' Day) el despertador suena a las 5:00, ya que debemos coger el transporte que nos llevará a la ciudad de Hopkinton, donde se inicia el recorrido. Nada más despertar, es momento de realizar el primer BMTest: 177, algo alto, por lo que opto por ponerme una unidad de insulina. Al menos, veo en la gráfica del freestyle que los niveles durante la noche no han sido malos del todo. Mantengo mi rutina de no desayunar.

Veinte minutos en metro nos separan de la zona de meta, donde se realiza la recogida de los corredores para llevarlos a la salida y donde se ubica el guardarropa. Para mi, esto supone un pequeño fastidio, ya que, si quiero realizar medición sanguínea antes de empezar la carrera, debo cargar conmigo el glucómetro y la insulina, por si es necesario poner algo más antes de empezar. Menos mal que compré un cinturón con buena capacidad en su día ;-)


El viaje hasta Hopkinton lo realizamos en los reconocibles autobuses escolares de Estados Unidos. Intento dormir algo, pero son incomodísimos. Ha empezado a llover con bastante intensidad y las caras de los corredores son de autentica preocupación. De hecho, hacemos una parada de unos quince minutos en una estación de servicio, ya que el conductor nos dice que esta pendiente de instrucciones por si tiene que cambiar de recorrido. Finalmente, se mantiene el plan original y llegamos a Hopkinton, donde tienen montadas unas grandes carpas que nos protegen de la lluvia y un gran número de voluntarios sirven café, te, bagels, geles y fruta.

Con un par de cafés y un par de visitas al baño, practicamente pasamos el tiempo de espera hasta la salida de nuestra oleada. Además, ha dejado de llover e incluso el sol ha hecho un amago de salir. El recorrido desde las carpas hacia la salida es de algo menos de 1km y se realiza de forma escalonada. Durante el trayecto, la gente del pueblo ofrece bebidas, fruta e incluso crema solar. El acceso a los cajones está fuertemente controlado, para que cada uno esté en el sitio que tiene que estar. Último abrazo con Álvaro para desearnos suerte antes de ubicarnos en el cajón que nos corresponde a cada uno. Pequeño calentamiento y último BMTest: 155. El freestyle marca una tendencia descendente, así que decido no ponerme insulina.

Por un pequeño pasillo, pasan a nuestro lado los corredores élite. Consigo chocar la mano con Yuki Kawauchi, que no deja de sonreir y jalear a los corredores populares, al contrario que los corredores africanos que van mucho más serios.


Aunque hay bastante gente, consigo ubicarme en segunda fila de mi cajón. Poco antes del inicio de la carrera, otro corredor me da la enhorabuena por estar allí. Señala el sensor del freestyle que llevo en mi brazo, me dice que conoce lo complicado que es gestionar una diabetes y que tiene mucho mérito hacer maratones. Casi se me cae la lagrimita... A las 10:02 se da la salida para los populares. Los primeros kilómetros son totalmente favorables y cuesta sujetar las piernas.

KM5. 19:36 (3:55 min/km). Glucemia 165. Aproximadamente cada dos millas hay un puesto de avituallamiento. El diseño de los mismos me parece muy acertado: primero, en un lado de la carretera y, unos metros después, en el otro lado. En ambos lados, hay varias mesas con powerade y otras tantas con agua, todo servido en vasos de papel. El sol ha aparecido un par de veces con fuerza y la humedad está muy presente. En el km7 ya voy totalmente sudado. El terreno sigue siendo favorable y mantengo un ritmo por debajo de 4:00min/km con relativa comodidad. No consigo encontrar un grupo en el que poder "engarcharme" para compartir el esfuerzo.

KM10. 39:27 (19:51 - 3:58 min/km el split). Glucemia 200. Aunque voy cómodo de piernas, la alarma del GPS ya me ha avisado varias veces que he superado las 170ppm. Seguramente eso es lo que ha provocado la subida de la glucosa. Decido mantener el ritmo y esperar al próximo split antes de tomar alguna decisión. El recorrido está lleno de gente ofreciendo cosas a los corredores, puedo ver agua, fruta, gominolas e incluso vaselina. Me sorprende la gran cantidad de gente que me adelanta, teniendo en cuenta el ritmo al que voy.


KM15. 59:23 (19:56 - 3:59 min/km el split). Glucemia 215. El nivel de glucosa sigue subiendo, impidiéndome tomar alguno de los geles que llevo encima. Lo bueno de llevar la insulina encima, es que puedo ponerme en cualquier momento, aunque eso me obligue a parar unos segundos. Decido bajar un poco el ritmo para ayudar a que baje el nivel de glucosa. En este split se encuentra una de las primeras cuestas importantes del recorrido. Poco antes del km20, la carrera pasa por Wellesley College, donde las estudiantes gritan enloquecidas a los corredores pidiendo que las besen. No os podéis imaginar el nivel de ruido que se genera, es totalmente ensordecedor y, en mi opinión, muy molesto. Afortunadamente, sólo están en un lado de la carretera, así que me alejo lo máximo posible ;-)

KM20. 1:19:47 (20:24 - 4:05 min/km el split). Glucemia 200. Una noticia buena y otra mala. La buena es que el nivel de glucosa ha empezado a bajar, así que descarto parar a ponerme insulina. La mala, ya me he dado cuenta que no es mi día, a pesar de que el paso de la media es el deseado, no voy fino, y eso que todavía quedan las peores cuestas del recorrido. En este split puedo ver una imagen muy desagradable. Un par de corredores apartan a otro corredor del recorrido, ya que este está totalmente zombie. Me recuerda a lo que viví en Londres, sólo que en esta ocasión es demasiado pronto. Otro par de cuestas en la parte final del split, me hacen replantearme la carrera y empezar a sacar la calculadora pensando en una marca por debajo de las tres horas.


KM25. 1:40:18 (20:31 - 4:06 min/km el split). Glucemia 160. La tendencia descendente de la glucosa, permite que me pueda tomar el primer gel. El recorrido es un continuo rompepiernas que imposibilita el coger un ritmo de crucero y sumar kilómetros. En una de las subidas más largas, noto un fuerte pinchazo en el isquio derecho. Me paro, estiro un poco y hago un pequeño tramo caminando. Vuelvo a correr y parece que se queda en una falsa alarma. Aunque he bebido agua en practicamente todos los avituallamientos, pienso que puedo estar un poco deshidratado y me obligo a beber más hasta la línea de meta.

KM30. 2:02:28 (22:10 - 4:26 min/km el split). Glucemia 110. El descenso en el ritmo de carrera se deja notar en la glucosa, por lo que opto por tomar un Gluc-Up. En este split, se encuentra la famosa "Heartbreak Hill", que todo el mundo que ha corrido Boston te menciona. Sin embargo, nadie te avisa de las tres colinas anteriores que te dejan las piernas totalmente tiesas. Me tomo las subidas con mucha calma e intento relajar las piernas en las bajadas. Eso sí, la animación en esos kilómetros es brutal y te obliga a esforzarte al máximo y no pararte en alguno de los puestos que huelen a comida (que es lo que te apetece)


KM35. 2:26:22 (23:54 - 4:46 min/km el split). Glucemia 90. Pequeña parada en el avituallamiento para tomar el gel y el agua con calma. De aquí a meta el terreno ya es más favorable, aunque todavía queda alguna pequeña subida, que te parece el Himalaya. Me he relajado demasiado en el split anterior y tengo que acelerar un poco para que no se me escape la marca de las 3 horas. Entramos en la ciudad de Boston y ya pienso en como me va a quedar la medalla de finisher.

KM40. 2:49:38 (23:16 - 4:39 min/km el split). Glucemia 100. Unos pocos metros delante mía veo a Álvaro y pienso que tenemos que entrar juntos en meta. No podia imaginar un mejor final para esta maratón, disfrutar junto a mi gran amigo de esa línea de meta y de ese medallón que le van a dar como finisher de las seis maratones calificadas como "Major". A la altura del km41 me pongo a su altura y noto que va algo más castigado que yo. Le digo que tenemos el sub 3horas en la mano y me pongo delante para marcarle el ritmo. Última subida del recorrido y encaramos la recta de meta. La emoción en el rostro de Álvaro es evidente.


Cruzamos la línea de meta, nos abrazamos, gritamos, lloramos... Es un momento precioso poder compartir con un amigo el poder cumplir un sueño.

En resumen, Boston es una maratón increíble. El nivel de la organización es altísimo en todos los aspectos: la gestión del desplazamiento de corredores hasta la salida, los avituallamientos, los voluntarios, la entrega de medallas y la recogida de bolsas en el guardarropa. Se nota que llevan 123 años haciéndolo. Además, aquí la gente viene a correr de verdad. Mi puesto en la clasificación es el 2488, en NewYork con un tiempo similar mi puesto fue el 722.

En cuanto a mi carrera en particular, debo decir que me equivoqué en el momento de la salida al no poner una unidad de insulina. La experiencia de Amsterdam, donde sí lo hice y luego estuve con niveles bajos, jugó en mi contra. A pesar de eso, después creo que hice una correcta gestión de la diabetes. El otro "pero" que me pongo es el inicio tan rápido que hice. Con ese terreno tan favorable es difícil frenarse, pero está claro que hay que hacerlo, ya que si no, al final lo pagas.

Boston Marathon - Glucemias

¿Qué planes tengo para el futuro? Pues en lo más inmediato, descansar y recuperar. Llevo casi un año sin parar más de una semana y eso no puede ser. Dos semanas a modo de enfriamiento, saliendo tres días a ritmo cómodo, y otras dos semanas de parón total es lo indicado por el mister para poder afrontar con garantía los retos de la segunda parte del año, con la Maratón de Donosti en el radar.

Gracias a todos los que me seguís. Un abrazo!!

viernes, 1 de febrero de 2019

EDP Medio Maratón Ciudad de Sevilla 2019


Hola a todos,

no se cumplió el objetivo de bajar de 1h18min que me había marcado para la Media de Sevilla. Tampoco pude bajar mi MMP en la distancia. Sin embargo, puedo decir que estoy satisfecho con el resultado obtenido, ya que hubo que lidiar con algún que otro inconveniente antes de afrontar la carrera. Además, acumulo una serie de carreras con buenas marcas y, lo que es más importante, buenas sensaciones en el transcurso de la carrera.

Diploma

El plan de entrenamiento diseñado por el míster para esta carrera ha durado 10 semanas, en las que he podido realizar el 95% de los entrenamientos. Sólo recuerdo un par de inconvenientes: un fuerte catarro con algo de fiebre, que me hizo tener que descansar un día más de la cuenta, y unas molestias en el gemelo de la pierna derecha en la últimas semana del plan, que afectó ligeramente a la estrategia de carrera.

Plan Preparación

El control de la glucemia durante el día antes de la carrera fue un completo desastre. No hago un buen calculo de las raciones de la comida del sábado, lo que me provoca un hiperglucemia superior a los 300mg/dl que consigo bajar hasta 188 antes de acostarme. Durante la noche, los valores se mantienen, por lo que al despertar (2h30min antes del inicio de la carrera) optó por ponerme 1ud de insulina que me ayude a llegar a la linea de salida en valores más adecuados.

Como tengo por costumbre, el desayuno se limita a un par de cafés. Nos desplazamos al lugar de salida y antes de dejar la mochila en el ropero (unos 30' antes de la salida) realizo la última medición en sangre. El valor es de 198mg/dl, lo que sigue siendo muy alto, así que me inyecto otra unidad de insulina

Glucosa Sábado

En estas circunstancias, y teniendo en cuenta que el gemelo ha seguido "protestando" durante el fin de semana, decido salir con una actitud algo más conservadora y esperar al desarrollo de la carrera. La mañana es bastante fresca pero está totalmente despejada de nubes, por lo que todo indica que tendremos una buena climatología para correr.

Estoy ubicado en el cajón 1, donde estamos todos los sub1h30min (excepto los élite). Esto me parece un error muy grave por parte de la organización, el numero de personas es muy elevado y además a ritmos muy diferentes. Consigo colocarme en tercera fila aproximadamente y aunque la calzada es muy ancha, los golpes y tropezones se suceden en los primeros metros.

Controlo el ritmo en torno a 3:45min/km en los primeros minutos y enlazo con un grupo grande donde va una de las primeras chicas. Observo que hay un par de corredores que están haciendo de "liebres" y que llevan un ritmo constante que se amolda a mis pretensiones. Me acoplo bien en el grupo y me resguardo lo máximo posible.

KM5. 18:42 (3:44 min/km). Glucemia 160. Los avituallamientos son muy grandes y están ubicados a ambos lados de la carrera. Sólo disponen de agua, en botellas de medio litro, para una media maratón tampoco es necesario mucho más. Sigo integrado en el grupo, pero a la altura del km8 noto que me cuesta seguir el ritmo. Miro el reloj y veo que el ritmo se ha acelerado hasta 3:40min/km. Pienso en gemelo, me descuelgo del grupo y me vuelvo a poner a mi ritmo. El nivel de esta carrera es altísimo, así que enseguida encuentro un nuevo grupo con el que compartir ritmo.

KM10. 37:25 (18:43 - 3:44 min/km el split). Glucemia 140. Tras el avituallamiento, hay una breve conversación en el grupo para hacer relevos por kilómetro a 3:45min/km. En mi relevo (del km 12 al 13) observo que me he quedado sólo. Momento de reflexión. El gemelo está respondiendo, los niveles de glucosa están más controlados y las sensaciones son muy buenas, así que tomo la decisión de no mirar atrás. En este split consigo adelantar a muchos corredores (25 según la clasificación final) incluso a la chica que comentaba anteriormente.

KM15. 56:10 (18:45 - 3:45 min/km el split). Glucemia 145. Aunque el nivel de glucosa no es bajo, decido hacer uso de uno de los geles que llevo encima. Tampoco quiero tomarlo entero, sólo quedan seis kilómetros, pero siento que lo necesito, aunque sólo sea a nivel psicológico. Cojo una de las botellas del avituallamiento, tiro la mitad del agua y vierto el gel dentro. Un par de tragos son más que suficientes para lo que necesito. Aunque estamos atravesando el centro de la ciudad, la animación brilla por su ausencia (aún es demasiado pronto)

En este tramo tengo la sensación de que el recorrido es siempre descendente. He acelerado el ritmo y pienso que puedo estar muy cerca de mi MMP.

KM20. 1:14:34 (18:24 - 3:40 min/km el split). Glucemia 150. Me exprimo hasta el final. Tanto, que apenas puedo disfrutar de la espectacular vuelta a la Plaza de España. Entro en la recta de meta veo que el reloj cambia a 1h18, quedan 200m, esprinto hasta el final, consiguiendo un crono final de 1h18min33seg. La mejor marca se escapa por apenas 14 segundos.

Plaza España

Me quedo con la sensación de que la mejor marca en la distancia estaba a mi alcance con una mejor gestión de la diabetes el fin de semana y sin tener que estar pendiente del gemelo.

El calendario no da tregua, así que tras una semana de recuperación activa, empezamos con el plan de preparación para la Maratón de Boston. Diez semanas en las que habrá al menos una competición (10K de Parla, el 17 Febrero)
 
Nos vemos en las carreras,